El fin del mundo

Parece que a las profecías que anunciaban el fin del mundo para este año han quedado obsoletas, ya que se está anunciando un evento solar de características muy peculiares para dentro de 8 años. Según diversos estudios realizados por el físico espacial Pete Riley , científico senior en Predictive Science (San Diego, California), se produciría una gigantesca tormenta solar aproximadamente en el 2020. Es cierto que ya hemos sufrido problemas de este tipo como el Evento Carrington ocurrido hace 150 años. Pero a diferencia de 1859, en el 2020 el mundo dependerá profundamente de las telecomunicaciones y los equipos electrónicos, elementos muy vulnerables a este tipo de fenómenos.

La humanidad siempre ha sentido una especial atracción por las profecías. Todavía es posible encontrar gente que revisa concienzudamente las denominadas “Profecías de Nostradamus” en busca de pistas sobre lo que nos depara el futuro. Algunos, incluso, llegaron a suicidarse a finales de 1999 para no tener que padecer los horrores que depararía el fin del mundo que ocurriría, según sus creencias en el año 2000. Durante miles de años tanto sacerdotes como iluminados o pitonisas se han dedicado a predecir nuestro final. Cabe señalar que el calendario maya marca el fin de nuestros días a finales de este mismo año. Pero esta vez no es una profecía ni una predicción sin base alguna sino el fruto del estudio de un afamado científico. Aún así no hay que alarmarse. La tormenta no debería significar la extinción de la vida en el planeta. Más bien la destrucción de gran parte de nuestra tecnología lo que supondría un tremendo retraso en nuesra forma de vida y una enorme pérdida económica.

Por supuesto, durante los 8 años que faltan para que esto pueda llegar a ocurrir, se pueden tomar medidas para mitigar sus efectos, reduciendo sustancialmente los daños. Aún así ni el propio Riley está seguro al cien por cien.